Los cuentos del tío Miguelito, parte 3


Guiño continuado a “Cien cuyes”, a propósito de la digitalización y la pandemia


En las entregas anteriores de esta columna hemos dado cuenta del aumento del uso de internet en adultos mayores —como los protagonistas de la novela Cien cuyes—y cómo esto fue encontrado beneficioso por varios de ellos según entrevistas realizadas en este estudio de Colombia y Perú

Estas historias personales ocurrieron en un contexto diferenciado en los dos países: mientras en Colombia todos los entrevistados mencionaron conocer internet, en Perú se trató de solamente la mitad. Asimismo, los colombianos asociaron internet a la obtención de información, poniendo en segundo plano a la comunicación. 

Por ejemplo, un entrevistado en Cali nos dijo: “Es algo muy importante, porque son cosas de que ya si no hay internet ya uno queda como mocho. Mocho: que no tiene comunicación ni nada. Al haber internet, usted tiene comunicación con todas partes”.

Una entrevistada en el Chocó nos describió con lujo de detalles el problema de congestión cuando todos están conectados: “El internet es un medio de comunicación rápido, pero últimamente tiene mucha falla. La otra vez, tres días sin internet en Chocó, prácticamente incomunicados por el internet. Nadie explica la razón. Todo el mundo se va pegando con los deportes, se va pegando con todo; la energía, el internet, el teléfono, con el tiempo eso colapsa y nos incomunicamos”.

Lo que destacó entre los peruanos fue la asociación de internet con la juventud.

Una mujer en Huancavelica nos contó: “Utilizan seguramente ellos [mis hijos, nietos], porque estudian. Y con internet, estoy diciendo que está. Será pues internet. Están estudiando. Están marcando. Así lo miro cuando entro a mis nietos, a su cuarto. […] ¿Para qué le usará? ¿Qué cosa harán? Pero ahí están manejando su… su internet será, pe, ¿no? Ahicito, pero ¿qué harán? ¿Qué hablarán? O no sé, pe. Pero ahí están. Así no más miro pe, yo. Están viendo. Están marcando. Hay veces, se ríen. Esa que noticia dicen. Así están”.

Y un hombre en Tacna: “Eso no comprendo ni tampoco, no tengo idea cómo será, no sé, mi hijo ha terminado secundaria, él sabe cómo es internet, todas esas cosas. Yo no sé nada, tampoco no… Claro que sé mirar… Internet será como máquina de escribir, como antes que había, así será, así parece, ¿no? […] ¿Qué cosa quiere decir virtual?”.

En línea con lo anterior, en Colombia los entrevistados afirmaron que internet es una necesidad, mientras que en Perú las opiniones fueron mixtas alrededor de los riesgos para encontrar contenido inadecuado o por el uso excesivo.

Un aspecto donde Colombia y Perú contrastan, con resultados tristes para el Perú, es el uso de la telemedicina. En Perú, se reportó casi ninguna incidencia, además de una sensación negativa frente a la atención presencial. Por el contrario, en Colombia, varios de nuestros entrevistados o sus conocidos o parientes hicieron uso de la telemedicina durante la pandemia.  

Pero esos usos nuevos o más intensos se acompañaron de impresiones positivas y negativas sobre el internet.

En ambos países, la percepción general es que el internet es beneficioso para los usuarios, sea para comunicarse o para obtener información. En Perú, hubo quejas sobre la falta de apoyo para aprender habilidades digitales y promover su uso. También en Perú, los entrevistados observaron que recibieron ayuda de sus familiares para poder aprender.

Pero también aprendimos sobre experiencias negativas. Nos contaron tener problemas con la vista o de motricidad en ambos países. En Perú, una de nuestras entrevistadas es analfabeta y ello complejiza aún más el uso de internet.

Finalmente, tendemos a pensar que tanto los terminales como el servicio son asequibles ahora. Y ello es confirmado por la gran mayoría de los adultos mayores entrevistados. La única excepción fue en el Perú, donde pudimos encontrar personas que indicaron tener dificultades económicas para acceder al servicio.

Parecería haber un espacio importante para las políticas públicas, a las que dedicaremos el último jugo de esta serie.


Pensar, escribir, editar, diseñar, coordinar, publicar y promover este y todos nuestros artículos (y sus pódcast) cuesta y nosotros los entregamos sin cobrar. Haz click en el botón de abajo para contribuir y, de paso, espía como suscriptor nuestras reuniones editoriales.


Comentarios

Aún no hay comentarios. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Volver arriba